Imagine tu piel junto a mi piel
mientras dormía, soñé tantas
veces con tu amor
que me supo a fantasía.
Y hoy logro probar lo salado
de este encuentro,
sentí la humedad de mis mejillas
mientras partías.
Me quede extrañando tu mirada,
aquella caricia inesperada y claro
el beso del adiós que nunca me diste.
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